Los vestidores han sido muy populares entre los consumidores domésticos en los últimos años, ya que ofrecen soluciones personalizadas de alta gama para el hogar. A medida que el nivel de vida de las personas sigue mejorando, las exigencias sobre la calidad del hogar se vuelven cada vez más altas. Así que, además de satisfacer la demanda de almacenamiento y colocación de ropa, los vestidores también añaden un toque de estilo al espacio del hogar, lo que se ha convertido en un símbolo de buen gusto personal.